Blog

¿Qué es el diseño de sonrisa?

El diseño de sonrisa forma parte de la planificación de los tratamientos de estética, haciendo referencia precisamente a recuperar la estética de la sonrisa. 

En nuestra consulta la planificación de un tratamiento estético requiere de varias pruebas. Por un lado se toman radiografías, y si es necesario un escáner, para comprobar que no haya patologías no visibles en la boca del paciente. Se toman varios registros fotográficos, sobre los que elaboramos un diseño acorde a lo que quiere cada paciente. También obtenemos de forma digital (mediante escáner intraoral, que comentaremos también en este blog) modelos de estudio del paciente. Estos modelos son una representación tridimensional de la boca del paciente, que nos permite trabajar con mayor precisión. Esta es la fase que denominamos “Diseño de sonrisa”. 

En primer lugar, con las fotografías observamos las líneas estéticas, y determinamos las proporciones adecuadas en los dientes. 

Consideramos tanto los dientes individualmente como también las líneas faciales. 

Posteriormente dibujamos cual sería el contorno ideal de los dientes para favorecer la estética. 

Por último, se puede realizar también una simulación aproximada de nuestra planificación, para ver junto con el paciente que queremos cambiar, y sobre eso elaboramos un plan de tratamiento individualizado. 

La simulación se puede realizar también sobre la sonrisa de los pacientes. 

El estudio de estética y el diseño de sonrisa se utilizan para planificar distintos tratamientos de estética, tanto carillas, blanqueamientos, fundas,… De hecho, lo más importante es determinar que es lo que busca cada paciente, y sobre eso decidir cuál es el tratamiento más indicado. Es precisamente en esto en lo que nos ayuda el “diseño de sonrisa”.

Blanqueamiento dental

En este blog vamos a explicar algunos de los puntos que originan dudas en torno a este tratamiento, según lo que nos preguntáis en la consulta. 

El blanqueamiento dental es uno de los tratamientos de estética más demandados, porque consigue importantes cambios en relativo poco tiempo y respetando mucho la integridad de nuestros dientes. Aun así, hay muchas preguntas en torno a este tratamiento: 

  • ¿Cuándo se puede hacer un blanqueamiento dental? 
  • ¿En qué consiste realmente el proceso de blanquear los dientes? 
  • ¿Tiene algún efecto secundario? 
  • Vemos en revistas y televisión unas sonrisas muy blancas y perfectas, ¿conseguimos ese resultado solo con el blanqueamiento? 
  • ¿Qué son los productos o técnicas de blanqueamiento que nos dicen que podemos hacer en casa? 

En esta entrada de blog vamos a responder a todas estas preguntas, pero recordad que como todos los tratamientos dentales hay aspectos que no se pueden generalizar, y deben de ir adaptados a cada uno de nosotros. Cualquier duda que tengas te la resolvemos encantados en nuestra consulta. 

Todos los tratamientos que ejemplificamos  con  imágenes en este blog han sido realizados en “Clínica Dental Dr. Sanz”, por la dra. Elena Sanz. 

¿Cuándo se puede hacer un blanqueamiento dental? 

A priori, la respuesta a esta pregunta sería SIEMPRE o CASI SIEMPRE. Realmente lo que nos limita a la hora de realizar un blanqueamiento dental es más saber cuál es el objetivo que perseguimos, y determinar si realmente con este tratamiento lo vamos a alcanzar, más que el hecho de que no pueda realizarse. De todas formas, hay una serie de limitaciones que debemos tener en cuenta: 

  • Los productos de blanqueamiento dental SOLO actúan sobre nuestro propio diente natural. 

Esto significa que, si por ejemplo, llevamos carillas hechas anteriormente, u obturaciones (el nombre técnico de los “empastes”), no van a cambiar de color. Igual si llevamos fundas sobre nuestros dientes, o nos hemos puesto un implante. 

  • Necesitamos un BUEN ESTADO DE SALUD BUCAL. 

Es decir, no podemos hacer un blanqueamiento en dientes que tienen caries o infecciones, o si tenemos un problema en las encías en el momento. Siempre se deben tratar antes todos los problemas o patologías, y lo último el tratamiento de blanqueamiento. Hay que realizar lo primero una consulta para ver cómo se organizaría el tratamiento global de manera que se pueda adaptar a cada caso. 

  • Determinados tipos de TINCIONES. 

Es muy importante resaltar que los dientes pueden oscurecerse por distintos motivos. En líneas generales, podemos hablar de factores extrínsecos, es decir, tinciones que vienen de fuera, como el consumo de alimentos que tiñen más o fumar, o factores intrínsecos, aquellas que vienen desde “dentro” del diente, como una infección que causa cambios en el color del diente. Hay que realizar un análisis previo al blanqueamiento para evaluar porque se han teñido los dientes, y en función de ello diseñar un plan de tratamiento adaptado a casa situación. Habrá casos en los que el blanqueamiento sea la mejor opción, otros en los que puede incluso no ser necesario y baste hacernos una “profilaxis o higiene dental”, comúnmente llamada “limpieza de boca”, y también puede darse la situación que determinadas tinciones tengamos que recurrir a otros tratamientos para conseguir el color blanco deseado, y combinarlo con el blanqueamiento. 

  • Qué queremos CONSEGUIR con el blanqueamiento. 

Es muy importante delimitar los límites que puede presentar este tratamiento, como cualquier otro. En el blanqueamiento influimos estrictamente en el color de nuestros dientes, nunca en la forma o la posición en la que se encuentran. Puede darse el caso que lo que realmente favorezca para mejorar la estética de nuestra sonrisa sea alinear mejor los dientes, más incluso que blanquearlos. Y también, hay que saber que el blanqueamiento aclara nuestros dientes hasta su tono natural más blanco, es decir, el límite está en nuestros dientes no en el producto que utilizamos. Llegado un momento, puede no conseguirse un efecto mayor aunque sigamos con el tratamiento, y si buscamos un color aún más blanco de nuestros dientes necesitaremos recurrir a otro tipo de tratamiento.  

Estas limitaciones que existen en el tratamiento del blanqueamiento las valorará el profesional dental que nos atiende, y formulará un plan de tratamiento más adecuado a lo que buscamos, de ahí la importancia de la CONSULTA INICIAL. 

¿En qué consiste el proceso de blanquear los dientes? 

En primer lugar, aquí hay que resaltar, como ya incidíamos anteriormente, que el blanqueamiento lo que realmente consigue es aclarar los dientes. Es decir, eliminar las tinciones que se han ido acumulando con el tiempo para conseguir devolver a los dientes el color más blanco inicial que teníamos. 

Las partículas que tiñen los dientes son cadenas moleculares más complejas que no reflejan la luz y dan la percepción de un diente más oscuro. El peróxido de hidrógeno, que es el producto blanqueante que utilizamos en distintas concentraciones, rompe esas cadenas largas en cadenas más cortas, y de esa manera favorece un mayor reflejo de luz causando la sensación de un diente más blanco. Dicho de otra manera, el peróxido de hidrógeno actúa como un oxidante dentro del diente. 

Es importante utilizar una concentración adecuada del producto blanqueador, peróxido de hidrógeno y peróxido de carbamida, de manera que se consigan resultados blanqueantes pero sin causar daño en la estructura del diente o en otras zonas de la boca. 

En nuestra consulta utilizamos habitualmente lo que denominados “tratamiento combinado”. Esto quiere decir que utilizamos dos tipos de concentraciones del peróxido de distinta manera, para lograr un efecto mayor y más duradero. 

Blanqueamiento en la consulta

Para realizar el blanqueamiento en la consulta, que habitualmente tiene una duración de 45 minutos a 1 hora, utilizamos una concentración mayor de peróxido de hidrógeno que colocamos únicamente sobre los dientes, asegurándonos de que no entre en contacto con ningún otro tejido de la boca, como las encías o la lengua. Esta primera parte del blanqueamiento favorece un aclaramiento más rápido, pero debe usarse con precaución y controlando en todo momento el efecto, para no causar sensibilidad, que es el efecto secundario más común en el blanqueamiento como veremos más adelante. 

Blanqueamiento ambulatorio, o blanqueamiento en casa 

Para esta fase del blanqueamiento confeccionamos unas férulas perfectamente adaptadas a la morfología de los dientes de manera individual para cada paciente, que deberán utilizarse para poner en contacto el agente blanqueante con el diente. En estos casos se utiliza una concentración inferior de peróxido de carbamida, que debemos dejar actuar durante más más tiempo y durante varias semanas. Así logramos aumentar el efecto de aclarado de los dientes y que este sea más duradero. 

¿Tiene algún efecto secundario? 

El blanqueamiento dental es un tratamiento de estética muy solicitado también porque no tenemos que “tocar” los dientes de ninguna manera para realizarlo. Es decir, no es un tratamiento irreversible, como sí lo serían por ejemplo en la mayoría de los casos las carillas, o siempre lo son las coronas. Estos tratamientos consiguen influir en más parámetros estéticos, pero a costa de perder más o menos estructura del diente. 

Cuando el blanqueamiento dental se realiza adecuadamente en principio no tiene por qué tener efectos secundarios a largo plazo. Sí que se ha observado, a corto plazo, que mientras estamos realizando el blanqueamiento puede aumentar la sensibilidad dental, especialmente en aquellas personas que ya la presentaban inicialmente o tienen mayor propensión a padecerla, pero esta circunstancia a menudo se resuelve de manera espontánea cuando terminamos de realizar el blanqueamiento. Además hay procedimientos y técnicas que nos permiten controlar y reducir la sensibilidad dental. 

Por otro lado, es importante controlar el tratamiento de blanqueamiento dental, también cuando se está realizando el llamado blanqueamiento ambulatorio, con revisiones periódicas en la consulta, para confirmar que no se están causando daños a otras estructuras al usar el producto blanqueante. 

Imagen que contiene foto, cepillo de dientes, alimentos, cerca

Descripción generada automáticamente

Vemos en revistas y televisión unas sonrisas muy blancas y perfectas, ¿conseguimos ese resultado solo con el blanqueamiento? 

En este punto debemos tener cuidado de analizar bien lo que vemos. En algunos casos, dependiendo de la situación inicial, o que es lo que haya causado el problema estético que percibimos, los resultados de una sonrisa “perfecta” no se consiguen solo con el blanqueamiento dental. En muchos casos, por ejemplo, están unidos a tratamientos de ortodoncia o de carillas. Estos son un tipo de tratamientos de estética combinados también muy demandados y con buenos resultados, pero hay que entender que no es exclusivamente el blanqueamiento dental. 

En el caso de los tratamientos de ortodoncia, conseguimos alinear los dientes en primer lugar, dando una apariencia más armónica a la sonrisa. Además, al conseguir unos dientes bien posicionados favorece que los efectos del blanqueamiento que se realice a continuación tengan un efecto a más largo plazo, dado que favorece la higiene dental diaria. Esto es, evitamos que una malposición de los dientes cree zonas de difícil acceso para el cepillado, y por tanto que se produzcan tinciones extrínsecas que, si bien se eliminarían con una profilaxis dental, puede llegar a ensombrecer los resultados del tratamiento de blanqueamiento. 

Por otro lado, un tratamiento combinado de carillas y blanqueamiento, en los casos en los que está indicado, ofrece una gran ventaja. Como hemos comentado anteriormente en este blog, hay veces que buscamos una tonalidad blanca en los dientes que no se puede lograr exclusivamente con el blanqueamiento dental y que necesita de otro tratamiento complementario. Sin embargo, si realizamos primeramente el blanqueamiento dental logrando una tonalidad más blanca en nuestros dientes, y posteriormente las carillas, estas precisarán de menor grosor de material para lograr el efecto deseado, y necesitaremos menos preparación dentaria, realizando así un tratamiento más conservador. 

¿Qué son los productos o técnicas de blanqueamiento que nos dicen que podemos hacer en casa? 

A esta pregunta hay dos respuestas posibles. Por un lado, recordar cómo hemos comentado anteriormente que hay un blanqueamiento ambulatorio que se realiza con control del profesional odontólogo en casa, mediante la confección de férulas adaptadas y utilizando generalmente como base de agente blanqueante el peróxido de carbamida. Esto es diferente de otros sistemas que puedan realizarse sin control del odontólogo, y que se han podido promover en distintas redes sociales y con los que hay que extremar la precaución, dado que pueden ser dañinos para nuestra salud. 

También existe una amplia gama de productos blanqueantes en forma de geles dentífricos y colutorios comercializados. Respecto a estos productos, en España hay que hacer una aclaración respecto a su composición. La concentración de peróxido de hidrógeno necesaria para lograr un efecto blanqueante solo puede distribuirse por legislación en las clínicas dentales. Si bien puede haber productos con concentraciones de peróxido de hidrógeno o peróxido de carbamida comercializados en otros países, en principio no pueden adquirirse en España. La mayoría de los “efectos blanqueantes” que se promocionan en dentífricos o colutorios actúan de forma distinta a como hemos explicado anteriormente en este blog. Son productos que contienen partículas más o menos abrasivas, que sin dañar nuestros dientes retrasan o disminuyen la acumulación de sedimentos en los dientes que dan una apariencia más oscura a nuestros dientes, y que habitualmente pueden eliminarse mediante una higiene o profilaxis dental. En nuestra consulta sí podemos recomendar el uso de este tipo de productos de higiene dental después de haber realizado un tratamiento de blanqueamiento como un método que busca alargar sus efectos en el tiempo, pero hemos de recordar que no consiguen por si solos el efecto blanqueante que a menudo buscamos.

Calidad de vida y satisfacción del paciente

“Evaluación de la calidad de vida y satisfacción del paciente a largo plazo tras tratamientos endodónticos y de implantes dentales realizados por profesionales expertos”

En este blog os queremos presentar el resumen de nuestro trabajo recientemente publicado en la revista “Journal of Dentistry”, revista de gran impacto en el sector odontológico. El estudio lo realizamos conjuntamente con la Dra. Magdalena Azabal y la Dra. Ana Arias. 

Este estudio surge para responder a una pregunta que nos plantean muy a menudo los pacientes a muchos odontólogos, ¿qué es mejor, conservar un diente o ponerse un implante? Bien, de esta manera, intentamos responder siguiendo el método científico, y evaluando si la calidad de vida de los pacientes es mejor al hacerse un tratamiento u otro. 

Como respuesta, con este estudio hemos observado que la satisfacción de los pacientes es alta con ambos tratamientos, años después de realizarse. Es una conclusión especialmente interesante dado que a todos los pacientes se les preguntó independientemente por cada tratamiento, y dieron una buena valoración de ambos.

Resumen estudio

Objetivo: El objetivo de esta tesis doctoral fue comparar la calidad de vida y satisfacción general con tratamientos de endodoncia e implantes en pacientes que han recibido ambos tipos de tratamiento, habiendo sido realizados por odontólogos expertos. 

Material y método: Tras el cálculo de tamaño muestral y aprobación del Comité Ético, se seleccionaron aquellos pacientes que hubieran recibido ambos, tratamiento de endodoncia e implantes, dos años previos a la realización del estudio. 27 pacientes cumplieron los requisitos de inclusión. Tras evaluar a los pacientes y determinar el éxito de ambos tratamientos, se excluyó un paciente debido a que presentaba fractura vertical en el diente endodonciado. Los 26 pacientes restantes recibieron cuestionarios de calidad de vida y satisfacción tras firmar el consentimiento informado de participación en el estudio. Se entregaron dos cuestionarios a todos los participantes para analizar la calidad de vida, a través del cuestionario Oral Health Impact Profile (OHIP), y la satisfacción con el tratamiento, a través de un cuestionario diseñado específicamente para este estudio. En cuanto a la calidad de vida de los pacientes, el cuestionario incluía las 14 preguntas del cuestionario OHIP-14 y 10 preguntas más del cuestionario OHIP-49. En cuanto a la satisfacción, se evaluó tanto la satisfacción general con el tratamiento, si volverían a someterse al mismo tratamiento en caso de necesidad y aspectos concretos relacionados con la duración del tratamiento, el coste, y el dolor experimentado tanto durante como después del tratamiento, mediante una escala de 0-10. Todos los pacientes cumplimentaron correctamente el cuestionario. Se calculó la puntuación del OHIP, tanto global como para cada dimensión, y la prevalencia de impacto de cada pregunta. Los pesos para el OHIP global y de cada dimensión, la satisfacción general y percepción de los pacientes se compararon con el test de Wilcoxon. La prevalencia de impacto y las respuestas dicotómicas relativas a la percepción del paciente con ambos tratamientos se compararon utilizando el test de chi-cuadrado. 

Resultados: La puntación del OHIP fue baja en ambos tratamientos (8,82 en el tratamiento de endodoncia y 7,87 en el tratamiento de implantes) lo que indica una alta calidad de vida. No se observaron diferencias significativas en la puntuación global del OHIP ni en ninguna de las dimensiones del cuestionario entre ambos tratamientos (p>0,05), excepto en la dimensión de “dolor físico”, que fue significativamente mayor en el tratamiento de endodoncia (p=0,04). La prevalencia de impacto fue baja en todas las preguntas (rango de respuestas entre el 73% y el 100% de baja prevalencia de impacto). Se observó mayor prevalencia de impacto en la pregunta de “retención de comida” para ambos grupos. No hubo diferencias significativas entre los grupos en la satisfacción general, ni en la percepción de duración del tratamiento, coste y dolor después del tratamiento (p>0,05). Solo hubo diferencias significativas en la pregunta de dolor durante el tratamiento, que fue mayor en el tratamiento de endodoncia (p=0,003). 

Conclusiones: Se observó una alta calidad de vida y gran satisfacción con el tratamiento en los dos grupos de tratamientos, sin diferencias significativas entre ambos excepto en la dimensión de “dolor físico”, que fue mayor en el tratamiento de endodoncia. Este estudio refleja la alta calidad de vida de los pacientes cuando los tratamientos de endodoncia e implantes los realizan profesionales experimentados, y al tratarse de un estudio en que cada paciente actúa como su propio control se elimina la variabilidad individual.

la importancia de la formación profesional y las pruebas diagnósticas

Estudio presentado en AEDE Valencia

“Influencia de las pruebas radiodiagnósticas y área de especialización odontológica en la decisión terapéutica de dientes endodonciados”

Este estudio lo presentamos en el Congreso 40º de la Asociación Española de Endodoncia, en Valencia. Se había realizado conjuntamente con la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad Europea de Madrid. 

La realización de este estudio surge de un dilema clínico habitual en odontología, la conservación de un diente o bien realizar la extracción, y como las pruebas diagnósticas que realizamos y la formación especializada del odontólogo pueden influir en el pronóstico final que observamos en cada situación. En nuestra consulta los casos complejos son siempre analizados tanto con radiografías como con CBCT (siglas en inglés para “Cone Beam Computed Tomography”, que habitualmente llamamos escáner óseo), y lo valoramos conjuntamente los profesionales de todas las áreas de especialización competentes, de manera que otorguemos una valoración final del caso al paciente incluyendo todas las posibles opciones de tratamiento y las indicaciones que presentan. 

Resumen

Objetivos: El objetivo del estudio es estudiar la influencia del área de conocimiento del odontólogo, endodoncia, implantes y odontología general, y de la prueba diagnóstica, radiografía y CBCT, en el tratamiento y pronóstico de casos complejos de fracaso de tratamiento de endodoncia. 

Material y método: 15 casos de fracaso de endodoncia fueron analizados por tres grupos de observadores, del área de endodoncia, implantes y odontología general, en dos sesiones de evaluación, con radiografía periapical y CBCT. Cumplimentaron un cuestionario en el cuál indicaron el tratamiento estimado, el pronóstico del tratamiento, la causa de extracción, y los odontólogos generales si derivarían el caso a otro profesional. Se analizaron las diferencias con la prueba de chi-cuadrado y test de Friedman.

Resultados: Se encontraron diferencias significativas en la selección del tratamiento en los tres grupos de observadores en las dos sesiones de evaluación. Los grupos de implantes y odontólogos generales seleccionaron significativamente en más casos la extracción e implante, y el grupo de endodoncia el retratamiento no quirúrgico. Los odontólogos generales derivaron significativamente más casos en la evaluación con CBCT.

Conclusiones: Tanto el área de conocimiento de los odontólogos, así como la prueba radiográfica utilizada para evaluar el tratamiento de los casos clínicos influyen significativamente en la estimación del tratamiento y el pronóstico en los casos de fracaso de tratamiento de endodoncia. La prueba radiográfica utilizada influye significativamente en la derivación de los casos por parte de los odontólogos generales.

Comparación entre una radiografía convencional (primera imagen) e imágenes del escáner (segunda imagen) y el modelo 3D.

¿Qué es la endodoncia? ¿Porqué hay que hacerla?

El tratamiento de endodoncia, pese a ser un tratamiento muy común, es más desconocido por los pacientes. Muchas veces se le conoce erróneamente como “matar el nervio”. Es un tratamiento difícil de explicar en que consiste o en que casos hay que realizarlo, dado que no se observan cambios visibles una vez se realiza. 

La endodoncia consiste en eliminar el tejido pulpar enfermo del interior del diente, y sellar el espacio que ocupaba previamente para prevenir una reinfección bacteriana. El diente, como todos los órganos del cuerpo, tiene nervios y vasos sanguíneos, que es a lo que se denomina tejido pulpar. Se encuentra en la parte más interna del diente, protegido por las capas de dentina y esmalte. Sin embargo, cuando se produce una caries o fractura lo suficientemente profunda, se ve afectado este tejido y en esos casos es en los que hay que hacer la endodoncia.

Habitualmente cuando empieza a verse afectado ese tejido hay dolor, sobre todo cuando tomamos cosas frías, aunque también puede ser al comer alimentos calientes, dulces o ácidos. En esta situación es importante acudir a revisión para valorar la necesidad de tratamiento. Si la caries aún no ha avanzado mucho, en fases iniciales puede evitarse hacer la endodoncia si el tejido pulpar no ha enfermado irreversiblemente. Hay que entender que aunque es muy molesto, el dolor también es un sistema de alarma del cuerpo que nos indica que hay un problema. Si se deja pasar, puede ser que el dolor desaparezca, pero eso no siempre indica que se haya pasado el problema.

Cuando presentamos una caries o una fractura durante mucho tiempo, finalmente el tejido pulpar “muere”, en términos clínicos, se necrosa el tejido, y aparece infección. En estos casos podemos incluso empezar a notar que se hincha mucho una zona de la boca, o que aparece una pequeña herida en la encía por la que sale pus. Esto ocurre cuando tenemos un flemón, o una fístula, que indican una infección en el hueso que rodea los dientes. En estos casos siempre hay que realizar el tratamiento de endodoncia.

Pero cuidado, si la caries es ya demasiado grande, aunque se podría tratar la infección, no podemos conservar el diente porque no queda apenas diente sano. Es por esto que es muy importante la detección cuanto antes de estos problemas, para que el tratamiento que sea necesario realizar sea el mínimo y con mejor pronóstico a largo plazo. 

Cuando realizamos la endodoncia eliminamos todo el tejido pulpar enfermo del diente, y se sella con un material llamado gutapercha hasta la punta de la raíz, para evitar en lo posible que pueda haber una nueva infección en ese punto. La caries se elimina también completamente, y realizamos una reconstrucción con composite del diente (a menudo llamado “empaste”), o si es muy grande podemos poner una corona o una incrustación.

¿Qué es la ortodoncia estética?

En los últimos años han aparecido nuevas técnicas de ortodoncia con alineadores que permiten realizar determinados tratamientos sin el uso de “brackets”, el sistema con ataches metálicos más utilizado. 

Estos sistemas se caracterizan por utilizar alineadores (como los que se ven en la imagen) para ir modificando la posición de los dientes, y así lograr los resultados de estética y salud que buscamos. 

En nuestra consulta llevamos ya años utilizando esta nueva tecnología, en este blog os contamos en qué consiste, cómo se hacen los estudios preliminares y cuando se puede utilizar esta técnica. 

En qué consiste la ortodoncia estética

El sistema de ortodoncia estética consta de una serie de alineadores más o menos  rígidos que se ponen tanto en los dientes de arriba como de abajo para ir cambiando la posición de los dientes. Hay que recordar que siempre que realizamos un tratamiento de ortodoncia se tienen que tener en cuenta modificaciones en todos los dientes. Por ejemplo, aunque nos centremos más cambios en los dientes de arriba, hay que tratar también los dientes de abajo, de forma que nuestra manera de morder siga siendo la correcta para que no haya problemas posteriormente. El número de alineadores distintos que tiene que utilizar cada paciente, y el tiempo que debe llevar cada alineador varía mucho en función de cuanto queremos mover los dientes. De manera estándar, podemos resumir que un tratamiento con pocos cambios puede necesitar 6 meses, mientras que un tratamiento en el que variamos mucho la posición dental puede llevar unos 2 años. Además después tenemos que hacer los mantenimientos correspondientes para evitar que los dientes vuelvan a su posición original. 

Estudio de tratamiento de ortodoncia estético

Cuando nos planteamos un tratamiento con un sistema de ortodoncia estética, o cualquier otro tipo de tratamiento de ortodoncia, lo primero que debemos realizar es el estudio de ortodoncia. 

En el caso de la ortodoncia estética esto incluye una serie de fotografías y radiografías, y también realizar un escaneado de nuestros dientes (como explicamos también en nuestro blog “¿Qué es el escáner intraoral?”). Una vez realizadas todas las pruebas el doctor elaborará un estudio particular para cada caso, y se presenta a nuestros pacientes como se expone a continuación. Es en este punto también cuando puede informarnos de si se puede realizar el tratamiento que deseamos utilizando está técnica, y cuanto tiempo de tratamiento aproximadamente llevaría. 

En este punto hay que hacer una pequeña aclaración importante, no siempre pueden utilizarse todas las técnicas de tratamiento para todos los casos. En función de las necesidades de cada paciente, puede no ser factible realizar un tratamiento de ortodoncia estética. Es muy importante siempre consultar a un odontólogo especialmente formado en ortodoncia para saber si se puede realizar el tratamiento. 

Ventajas y desventajas de los tratamientos de ortodoncia estéticos

La ortodoncia estética tiene una serie de ventajas para el paciente muy importantes. La principal es que los alineadores son muy poco visibles, especialmente comparados con los brackets metálicos. Se ha descrito está técnica como “ortodoncia invisible” también. Nosotros no hemos utilizado este término porque, si como hemos dicho los alineadores suelen pasar desapercibidos en el momento en que se están utilizando, no son completamente invisibles, y este término puede llevar a confusión. 

Otra ventaja importante es que facilitan la higiene bucal, al poderse retirar para el cepillado dental y lavarse aparte los alineadores, y no presentan posibles rozaduras como puede ocurrir al iniciar un tratamiento de ortodoncia con brackets. 

En tercer lugar, se ha observado también que como producen movimientos dentales más pequeños, y más a nivel de la corona del diente (la porción de diente visible en la boca) que en la raíz, el riesgo de reabsorción de las raíces (es decir, la disminución de la longitud de la raíz del diente) es menor que con otros tratamientos. 

Sin embargo, hay que tener en cuenta, como hemos dicho al inicio de este blog, que no siempre se puede utilizar este sistema. Cuando los movimientos que necesitamos realizar para conseguir una buena salud y estética son muy grandes, los alineadores no tienen “suficiente fuerza” para hacerlo, y por tanto no están aconsejados. En esos casos muchas veces hay que recurrir al tratamiento con brackets si queremos obtener un buen resultado. 

Además con este tratamiento hay que ser especialmente estricto y cuidadoso. Los alineadores deben llevarse el máximo número de horas al día para que hagan su función, retirándose solo en las horas de las comidas, y volviendo a utilizarlos lo antes posible. Si no se realiza de esta manera, el tratamiento puede alargarse varios días o semanas, dado que no hemos dado tiempo a los alineadores a hacer su función. Igualmente la higiene debe ser estricta. Siempre que se utiliza tratamiento de ortodoncia, como se introducen elementos en la boca, es más fácil la retención de alimentos y placa bacteriana, y en consecuencia la aparición de las caries. Los alineadores también deben lavarse adecuadamente para evitar que se puedan teñir, y perder la ventaja de que pasen desapercibidas cuando las estamos utilizando. Todas estas indicaciones se las da el odontólogo que realice el tratamiento, y se adecúan a las necesidades de cada paciente. 

Estudio científico Congreso Denver

“Evaluación de la calidad de tratamiento y lesiones óseas asociadas a implantes y dientes endodonciados, evaluados mediante CBCT por especialistas”

Elena Sanz, Magdalena Azabal, David Collados, Ricardo Ortega y Ana Arias. 

Os presentamos el resumen de este interesante estudio que presentamos en el Congreso de la Asociación Americana de Endodoncia en Denver en 2018. El estudio lo realizamos conjuntamente con la Dra. Magdalena Azabal, el Dr. David Collados, el Dr. Ricardo Ortega y la Dra. Ana Arias, en la Universidad Complutense de Madrid. 

Este estudio busca analizar desde la perspectiva de distintos profesionales el uso de una tecnología cada vez más utilizada en el área de la odontología, la tomografía axial computarizada, comúnmente llamado escáner óseo. Esta tecnología nos permite, al igual que las radiografías, visualizar los tejidos duros del organismo, como son huesos y dientes, pero de manera tridimensional. De esa manera aporta mucha más información que las radiografías bidimensionales. Actualmente en nuestra consulta este es un método diagnóstico en muchos tratamientos, incluidos aquellos que analizamos en el estudio, los implantes dentales y la endodoncia. 

Resumen estudio

Objetivos: El objetivo de este estudio es evaluar la calidad del tratamiento y la presencia de lesiones óseas asociadas mediante tomografía axial computarizada (CBCT por sus siglas en inglés, Cone Beam Computed Tomography) en pacientes que presentan un diente endodonciado y un implante dental en posición contralateral, analizado por distintos especialistas. 

Material y método: 36 CBCTs de pacientes que presentaban un diente endodonciado y un implante dental en posición contralateral fueron analizados. Un operador entrenado realizó mediciones cuantitativas para el análisis tanto de la calidad del tratamiento (posición del implante y longitud de la obturación en el diente endodonciado) como del tamaño de la lesión utilizando el programa Carestream ®. Un cuestionario específico fue diseñado para la evaluación de los dos tratamientos y fue completado por 5 odontólogos (previamente calibrados). Los 5 odontólogos observadores fueron dos odontólogos generales, dos odontólogos especializados en endodoncia y un odontólogo especializado en implantes. Se proyectaron las imágenes previamente seleccionadas y más representativas de cada caso tomadas del escáner CBCT.  Los datos se tabularon y se realizó el análisis estadístico.  Se analizó el acuerdo interobservador mediante el índice kappa (Kw), tanto entre los observadores como respecto a las valoraciones cualitativas derivadas del cuestionario con las mediciones cuantitativas, y posteriormente mediante regresión logística la influencia del tratamiento realizado y la localización del diente en la arcada, así como las valoraciones derivadas de las mediciones cuantitativas realizadas en cuanto a la calidad de tratamiento en la presencia o ausencia de lesiones óseas. 

Resultados: El acuerdo intervoservador varió de un índice kappa alto (Kw=0,91), como el encontrado entre las valoraciones de los dos odontólogos dedicados exclusivamente al tratamiento de endodoncia, hasta un índice kappa bajo (Kw=0,14), que se encontró entre las valoraciones de un odontólogo dedicado al tratamiento de endodoncia y un odontólogo dedicado al tratamiento de implantes. La presencia de lesiones óseas alrededor de los implantes no estaban significativamente relacionados con ninguna variable independiente, mientras que la posición del diente endodonciado sí estaba significativamente relacionada con la presencia de lesión ósea, siendo mayor en dientes posteriores que en dientes anteriores (p=0,04). Los implantes dentales presentaron significativamente más lesiones óseas asociadas que los dientes endodonciados. 

Conclusiones: no hubo diferencias significativas en la calidad de los tratamientos de endodoncia e implantes, pero sí se observaron significativamente más lesiones asociados a implantes dentales que dientes endodonciados.

¿Qué es mejor, conservar un diente o ponerse un implante?

Artículo publicado en la revista “Journal of Dentistry”

“Evaluación de la calidad de vida y satisfacción del paciente a largo plazo tras tratamientos endodónticos y de implantes dentales realizados por profesionales expertos”

En este blog os queremos presentar el resumen de nuestro trabajo recientemente publicado en la revista “Journal of Dentistry”, revista de gran impacto en el sector odontológico. El estudio lo realizamos conjuntamente con la Dra. Magdalena Azabal y la Dra. Ana Arias. 

Este estudio surge para responder a una pregunta que nos plantean muy a menudo los pacientes a muchos odontólogos, ¿qué es mejor, conservar un diente o ponerse un implante? Bien, de esta manera, intentamos responder siguiendo el método científico, y evaluando si la calidad de vida de los pacientes es mejor al hacerse un tratamiento u otro. 

Como respuesta, con este estudio hemos observado que la satisfacción de los pacientes es alta con ambos tratamientos, años después de realizarse. Es una conclusión especialmente interesante dado que a todos los pacientes se les preguntó independientemente por cada tratamiento, y dieron una buena valoración de ambos. 

Resumen estudio

Objetivo: El objetivo de esta tesis doctoral fue comparar la calidad de vida y satisfacción general con tratamientos de endodoncia e implantes en pacientes que han recibido ambos tipos de tratamiento, habiendo sido realizados por odontólogos expertos. 

Material y método: Tras el cálculo de tamaño muestral y aprobación del Comité Ético, se seleccionaron aquellos pacientes que hubieran recibido ambos, tratamiento de endodoncia e implantes, dos años previos a la realización del estudio. 27 pacientes cumplieron los requisitos de inclusión. Tras evaluar a los pacientes y determinar el éxito de ambos tratamientos, se excluyó un paciente debido a que presentaba fractura vertical en el diente endodonciado. Los 26 pacientes restantes recibieron cuestionarios de calidad de vida y satisfacción tras firmar el consentimiento informado de participación en el estudio. Se entregaron dos cuestionarios a todos los participantes para analizar la calidad de vida, a través del cuestionario Oral Health Impact Profile (OHIP), y la satisfacción con el tratamiento, a través de un cuestionario diseñado específicamente para este estudio. En cuanto a la calidad de vida de los pacientes, el cuestionario incluía las 14 preguntas del cuestionario OHIP-14 y 10 preguntas más del cuestionario OHIP-49. En cuanto a la satisfacción, se evaluó tanto la satisfacción general con el tratamiento, si volverían a someterse al mismo tratamiento en caso de necesidad y aspectos concretos relacionados con la duración del tratamiento, el coste, y el dolor experimentado tanto durante como después del tratamiento, mediante una escala de 0-10. Todos los pacientes cumplimentaron correctamente el cuestionario. Se calculó la puntuación del OHIP, tanto global como para cada dimensión, y la prevalencia de impacto de cada pregunta. Los pesos para el OHIP global y de cada dimensión, la satisfacción general y percepción de los pacientes se compararon con el test de Wilcoxon. La prevalencia de impacto y las respuestas dicotómicas relativas a la percepción del paciente con ambos tratamientos se compararon utilizando el test de chi-cuadrado. 

Resultados: La puntación del OHIP fue baja en ambos tratamientos (8,82 en el tratamiento de endodoncia y 7,87 en el tratamiento de implantes) lo que indica una alta calidad de vida. No se observaron diferencias significativas en la puntuación global del OHIP ni en ninguna de las dimensiones del cuestionario entre ambos tratamientos (p>0,05), excepto en la dimensión de “dolor físico”, que fue significativamente mayor en el tratamiento de endodoncia (p=0,04). La prevalencia de impacto fue baja en todas las preguntas (rango de respuestas entre el 73% y el 100% de baja prevalencia de impacto). Se observó mayor prevalencia de impacto en la pregunta de “retención de comida” para ambos grupos. No hubo diferencias significativas entre los grupos en la satisfacción general, ni en la percepción de duración del tratamiento, coste y dolor después del tratamiento (p>0,05). Solo hubo diferencias significativas en la pregunta de dolor durante el tratamiento, que fue mayor en el tratamiento de endodoncia (p=0,003). 

Conclusiones: Se observó una alta calidad de vida y gran satisfacción con el tratamiento en los dos grupos de tratamientos, sin diferencias significativas entre ambos excepto en la dimensión de “dolor físico”, que fue mayor en el tratamiento de endodoncia. Este estudio refleja la alta calidad de vida de los pacientes cuando los tratamientos de endodoncia e implantes los realizan profesionales experimentados, y al tratarse de un estudio en que cada paciente actúa como su propio control se elimina la variabilidad individual.

¿Qué es el escáner intraoral? ¿Para que se utiliza?

El escáner intraoral es una nueva tecnología aplicada en odontología. Nos permite, mediante la captura fotográfica, elaborar un modelo tridimensional de la boca de nuestros pacientes. 

Proceso de registro del escáner

En el vídeo se muestra el proceso de registro del escáner. Utilizando una cámara intraoral, se va elaborando el modelo de los dientes. En el recuadro inferior se puede ver la secuencia fotográfica que va realizandose de los dientes, y como se va transformando en el modelo digital. 

Se realiza un modelo superior y un modelo inferior de todos los dientes, y posteriormente se articula de manera que veamos la manera exacta de la mordida del paciente, como se muestra en el siguiente video. 

Escáner para ver bien la mordida del paciente

Esto aporta grandes ventajas en los tratamientos odontológicos. 

Las grandes ventajas del escáner

En primer lugar, el proceso de digitalización de los pasos de elaboración de una prótesis aumenta la exactitud con la que se trabaja. En nuestra consulta enviamos estos archivos digitales directamente a nuestro laboratorio protésico, que a su vez diseña digitalmente la prótesis que llevará el paciente (como por ejemplo, las coronas que ponemos sobre los implantes). 

Como se ve en el vídeo, permite también el análisis de zonas de la boca que no serían visibles sin elaborar estos modelos, como es la zona posterior de los dientes cuando la boca está cerrada. Además, se pueden visualizar todos los planos más cómodamente tanto para el profesional como para el paciente. 

La elaboración de estos modelos digitales facilita que varios profesionales de distintas especializaciones puedan estudiar cada caso particular, de manera que se otorga una visión global a cada paciente, siempre en busca del tratamiento más indicado para cada uno. 

Estos modelos digitales sustituyen en la mayoría de los casos a la forma convencional de la toma de registros en tratamientos de prótesis fija tanto sobre los dientes (lo que llamamos las fundas o coronas) como sobre los implantes. Esto hace más agradable el proceso para el paciente, al no necesitar introducir en boca una pasta (como es el alginato o la silicona que se utilizan) para elaborar el molde de los dientes.

Tecnología en la clínica dental, el CBCT o escáner óseo.

En este blog os explicaremos qué es el CBCT o escáner óseo y para que lo utilizamos en la consulta. Llevamos muchos años utilizándolo, y con la gran ventaja de disponer de la tecnología en la propia clínica, así el paciente no necesita trasladarse para realizar esta prueba diagnóstica.

Imagen de CBCT de nuestra consulta

El CBCT viene de sus siglas en inglés, Cone Beam Computed Tomography, que traducido al español es la Tomografía Axial Computerizada. Se trata de una herramienta de radiodiagnóstico, es decir, de diagnóstico mediante rayos X.

 Imagen del modelo 3D

También le denominamos escáner óseo haciendo alusión a las partes del organismo que nos permite visualizar, es decir, los huesos y los dientes, que como también son tejidos duros aparecen en estas imágenes. Por ejemplo, no permite visualizar correctamente la piel o las encías, que son tejidos blandos.

Realizamos un escáner cuando queremos ver estructuras que no son visibles, o no del todo visibles, con las radiografías convencionales.

Imagen del modelo 3D

La diferencia esencial entre una radiografía convencional y el CBCT es que en el primer caso vemos una imagen bidimensional, mientras que el CBCT permite valorar volúmenes, es decir, imágenes tridimensionales. Además, se trata de imágenes no distorsionadas, lo que implica que el tamaño de las estructuras anatómicas que observamos se corresponde con la realidad. Esto facilita en muchos casos no solo el diagnóstico de enfermedades sino que simplifica el tratamiento.  En las siguientes imágenes se muestra una secuencia de radiografía convencional, en el que se aprecia ligeramente la lesión en el hueso, mientras que se observa con mucha más claridad y exactitud en las imágenes que se corresponden con el escáner.

Comparación entre una radiografía convencional (primera imagen) e imágenes del escáner (segunda imagen) y el modelo 3D. El asterisco (*) corresponde con la zona de lesión del hueso por infección.

En nuestra consulta utilizamos el CBCT como herramienta diagnóstica en distintos campos. 

Para la colocación de implantes dentales todos nuestros estudios se basan en la información aportada por el escáner, mucho más exacto que las radiografías. Podemos analizar, por ejemplo, la anchura que tiene el hueso y la calidad del mismo, algo que no es posible con las radiografías. De esta manera se pueden colocar implantes de forma más predecible y exacta, lo que reporta un beneficio a corto y largo plazo para el paciente, mejorando el pronóstico de los implantes.

Imágenes de la planificación de dos implantes con escáner óseo.

Cuando hay sospechas en la presencia de lesiones en el hueso causadas por infecciones dentales el escáner también es esencial. Por un lado, confirmamos la presencia de lesiones que se ven difusas en radiografías o que directamente no serían detectables, y además vemos si afectan a otras estructuras del cuerpo cercanas, como otros dientes, el senos maxilares, nervios,… 

Cuando hay que realizar extracciones de las muelas del juicio también se utiliza el escáner, sobre todo en casos más complejos, pues permite predecir posibles complicaciones posteriores si está cerca del nervio dentario inferior,…

Entre sus otras aplicaciones está la detección de anatomías anómalas y más complejas, como mayor número de raíces en los dientes, o incluso facilita la detección de fracturas en la raíz del diente.